Resumen de la tesina fin de máster.
El caos sistémico que estamos provocando en nuestro planeta está acelerando la desaparición de la diversidad, tanto biológica como cultural, afectando seriamente a la resiliencia de ecosistemas y comunidades y, por tanto, debilitando nuestra capacidad de respuesta frente a los choques que ya estamos empezando a recibir.
La recuperación de un equilibrio global pasa por el decrecimiento consciente de las economías, la relocalización de nuestros modos de vida y la reconexión con el medio natural que nos sustenta.
Vivimos en momentos de cambio obligado, ¿sabremos aprovechar las oportunidades que se nos presentan para recobrar un nuevo equilibrio?
Partiendo de la necesidad de buscar nuevas herramientas que permitan afrontar las crisis de sostenibilidad presentes y futuras surge este acercamiento al reciente y novedoso movimiento Transition Towns.
Se trata una iniciativa propositiva y de enfoque holístico, basada en las problemáticas interrelacionadas del peak oil y el cambio climático y que enfoca su respuesta en la reconstrucción de resiliencia comunitaria mediante proyectos de relocalización adaptados a cada contexto particular.
El movimiento de transición, basado en la inclusión y no en la confrontación, como en los movimientos activistas o antisistema, supone una bocanada de aire fresco y puede aportar grandes enseñanzas a nuestro contexto particular.
Entre ellas destacan la incorporación de una visión eminentemente práctica y positiva, y la aportación de una metodología sencilla y abierta. Sin embargo, es importante añadir que existen aspectos del movimiento Transition Towns que deberían mejorarse entre los que destaca la inclusión de la problemática de la gobernabilidad en su discurso.
En la actualidad existe un confrontamiento dialéctico que carece de sentido entre los movimientos de carácter más revolucionario, como por ejemplo los movimientos antiglobalización o el Decreixement en Catalunya, y las iniciativas en transición, de carácter reformista. Ambas son herramientas diferentes e imprescindibles, por lo tanto los esfuerzos deben dirigirse hacia la colaboración mutua entre los actores que buscan un fin común.
La Tierra, con sus recursos naturales finitos, nos obliga a repensar nuestra manera de actuar, individualmente, entre nosotros y para con ella, y en ese camino de oportunidades ha llegado el momento de empezar a trabajar conjuntamente por un futuro más justo y sostenible. Es el momento de pasar de la idea a la acción.
Fuente: De la idea a la acción; Aprendiendo del movimiento Transition Towns