Más de tres millones de personas pasan hambre en España. En cambio, cada año se lanza a la basura más de nueve millones de toneladas de comida. El programa ‘Salvados‘ intenta averiguar quién es el responsable de ese desperdicio en ‘Con la comida no se juega’.
El espacio muestra casos de alimentos que se desperdician antes de llegar al consumidor. Jordi Évole visita un campo de mandarinas, donde más del 40% de la producción se descarta por no cumplir los criterios estéticos que imponen los supermercados. Y también se desplaza a Galicia, donde los pescadores se ven obligados a tirar por la borda toneladas de pescado muerto, para respetar la normativa de la Unión Europea. El espacio cuenta con los testimonios de Joan Baldoví, diputado en el Congreso por Compromís-Equo, para saber si los políticos están preocupados por esta situación anómala, y Jaime Serra, presidente del Banco Solidario de Alimentos de Valencia, entre otros.
Fuente: http://www.lasexta.com